martes, marzo 15, 2005

TRAVESIA A GARGANTA DEL CARES

En la fotografía se ve a Ángeles, la esposa del autor, encabezando la marcha.

Acceso: de Tapia a Arriondas y Cangas de Onís por la carretera de Santander, de Cangas de Onís por la carretera del Pontón hasta Posada de Valdeón y Cordiñanes. A partir de aquí sigile la carretera, mal estado en tramos, hasta Cain. Como es una travesía, hay que preveer la manera de volver a recoger el coche desde Poncebos (a más de 100 Km. por carretera). En autobús sólo se llega hasta Posada de Valdeón.

Horario: de Cain a Poncebos unas tres horas. Concejo de Cabrales. Desnivel: de subida prácticamente inexistente, de bajada 200 m. aproximadamente.

Descripción de la ruta: a pesar de que se puede realizar a partir de Cain, lo más normal es hacerla en excursión de autobús para una vez en Poncebos no tener que regresar para recoger el coche. En este caso hay que realizarla partiendo desde Posada de Valdeón, 21 kilómetros hasta Poncebos (algo más de seis horas). Vamos a describir la ruta como si se hiciese de esa forma.

Toda ella discurre por inmejorable camino, casi todo llano. Desde Posada de Valdeán a Cordiñanes no hay más que seguir la carretera que sale del centro de la plaza, pasamos por Cordiñanes observando ya la alta montaña de losmacizos Occidental y Central acercándonos para formar a partir de Cain la estrecha garganta surcada por el río Cares y que es verdaderamente la maravilla de la que han hablado tantos autores de literatura de montaña y de turismo.

A partir de Cordiñanes seguimos para, en poco, llegar a un mirador con la escultura de un rebeco, animal típico de los Picos de Europa, el llamado Mirador del Tombo. Unos kilómetros más abajo (toda la senda según la hacemos lleva río ahajo) pasamos al lado de un choreo para cazar lobos de renombrado tipismo y antiguo origen. Más abajo pasamos junto a la Majada de Corona, en donde según la leyenda fue coronado Pelayo caudillo de los pueblos que iniciaron la reconquista.

Al poco ya llegamos al pueblo de Caín, típico pueblo de pastores que son famosos por su facilidad para trepar por la roca (no en vano uno de los primeros ascensionistas al Naranjo fue de este pueblo, Gregorio Pérez "El Cainejo"). A partir de Cain el caudal del río se estrecha y las paredes de los dos grandes macizos también formando la garganta. Salimos de Cain, cruzamos el puente sobre la presa y seguimos a través de vados túneles excavados en la roca. A partir de ahora la senda va a ir excavada en roca viva.

Cruzamos primero el puente de los Rebecos a gran altura sobre el río y más allí, el conocido puente de Bolín, más alto aún. Como a mitad de garganta se encuentra el caserío de Culiembro, antigua aldea situada en el fondo de la canal que del Cornión baja y lleva ese nombre. Buen lugar para parar.

En tramos vemos abajo junto al río la antigua senda o camino que unía Poncebos con Caín y nos maravillamos de su dificultad. Seguimos camino y nos acercamos al lugar denominado de los Collados, único tramo de la senda que hay que realizar pequeña ascensión. Como está casi al final popularmente se le denomina "La Puntilla". Una vez arriba sólo nos queda un descenso por la senda que se estrecha aunque en ningún momento se hace difícil, para salir a una buena pista, muy cerca ya de Puente Poncebos.

Manuel Pérez Fernández

(Desde Foz, Lugo, España)

Etiquetas: